viernes, 24 de julio de 2009

Probioticos: ¿Cuan amistosos son?

¿Listo para algunas culturas vivas, activas en su chocolate? ¿Que tal sobre su cereal de desayuno? Probioticos, las bacterias amistosas supuestas a ayudar contra la enfermedad y usadas como un remedio natural, han salido de los productos lacteos y están colonizando otras áreas del supermercado.

Las bacterias, que ocurren naturalmente en alimentos fermentados tales como yogur, kéfir y miso, son promovidas como un remedio natural para ayudar a la digestión y para apoyar el sistema inmune balanceando el ecosistema intestinal.

Pero segun los fabricantes agregan los microbios desde fórmula infantil, zumo de fruta a la pizza y a las barras de granola, los expertos advierten que el uso de la palabra "probiotico" es empleado mal extensamente por la industria y entendido mal por los consumidores.

Mientras que hay millares de cepas bacterianas, sólo alguna docena se ha probado para ayudar contra la enfermedad. Los estudios sugieren que algunos productos puedan ofrecer alivio para problemas digestivos, pero no se conoce si la gente sana se beneficia de "alimentarse" con bacterias vivas.

La Autoridad de la Seguridad Alimentaria de la Unión Europea comenzó un proceso para regular demandas de la salud en productos, incluyendo probioticos. Y un pleito colectivo pendiente alega que Dannon engañó a consumidores sobre las ventajas de Activia y de DanActive, ambos puestos como probioticos.

Dannon niega el usar publicidad engañosa y está presentando los estudios que los apoyaron.

No hay definición estándar de probioticos, según la Agencia Federal de Medicamentos y Alimentos (FDA), pero los científicos dicen generalmente que el término se refiere a los alimentos, bebidas, suplementos y remedios naturales que contienen microorganismos vivos y que demuestran que promueven la salud cuando la gente toma bastantes de ellos. Sin estudios, los productos no deben llamarse probióticos, dicen los científicos.

Aunque los probioticos como remedio natural no son una nueva invención -- también se encuentran en la leche materna -- los investigadores apenas están comenzando a entender el papel que pueden desempeñar en la regulación del sistema inmune y el manejo de enfermedades. Los científicos no pueden todavía explicar exactamente cómo trabajan los probioticos, pero se sabe que pueden ayudar a restaurar bacterias beneficiosas en la zona intestinal.

Las bacterias pueden producir anticuerpos para ciertos virus, fabricar sustancias que previenen la infección o evitar que las bacterias dañinas se peguen a la pared intestinal y crezcan allí, según la Asociación Gastroenterológica Americana. Pero si esas bacterias son sacadas hacia fuera por enfermedad o la medicación, los microbios potencialmente dañinos pueden prosperar.

Los estudios más fuertes han encontrado que algunos probioticos (Lactobacillus GG y la levadura Saccharomyces boulardii) pueden ayudar como remedio natural contra los desordenes gastrointestinales comunes que pueden implicar un desequilibrio de las bacterias en el intestino.

También hay evidencia creciente que los niños con colitis ulcerosa pueden beneficiarse, y ciertos suplementos probioticos han demostrado reducir síntomas del síndrome de intestino irritable.

Pero más investigación es necesaria para estudiar los efectos probióticos sobre casi el resto de las condiciones, incluyendo cáncer, salud oral, alergias, condiciones de piel y obesidad.

Para el consumidor, encontrar el suplemento probiótico correcto puede ser desconcertante. Las etiqueta no pueden declarar legalmente que el probiótico puede curar, tratar o prevenir enfermedad. Asi que reclamos de la salud, que no requieren la aprobación del FDA, es a menudo vago.

Para hacer las cosas mas complicadas, los probioticos interactuan con las bacterias ya en el cuerpo, y cada uno tiene una microflora levemente diferente. Asi que un producto que trabaja para una persona no necesariamente trabaja para otra.

miércoles, 22 de julio de 2009

NÚMEROS MICROBIANOS Y EL ECOSISTEMA INTESTINAL

La zona larga del intestino mide de 25-35 pies en un ser humano adulto y se estima puede abrigar cerca de 100 trillones de bacterias vivas. Ésto es aproximadamente 10 veces el número total de células en el cuerpo humano. Estas bacterias vivas explican alrededor de 2 libras del peso del cuerpo y se conoce como flora intestinal. Los virus, los hongos y los protozoos pueden también estar presentes, pero éstos forman normalmente solamente un componente de menor importancia de la población residente total de microorganismos en individuos sanos.

La densidad de microorganismos en la flora intestinal aumenta dramáticamente a partir de 10-1.000 CFU/ml en el estómago a 10-100 mil millones CFU/gm en el intestino grande y éstos pertenecen a tanto como 400 diversas especies, y las bacterias anaerobicas exceden en número a las bacterias aerobicas por un factor de 1000: 1. La flora anaerobica es dominada por Bacteroides, bifidobacteria, bacterias propiónicas y clostridiums. Entre las enterobacterias de las bacterias aerobicas y anaerobicas, principalmente Escherichia Coli, y los enterococos predominan.

Las bacterias se han estimado que constituyen de 35-50% del volumen del contenido en el colon. Influencian los procesos alimenticios, fisiológicos y protectores como remedios naturales. Ambas funciones defensivas directas e indirectas son proporcionadas por la microbiota normal. Específicamente, las bacterias del intestino previenen directamente la colonización por los organismos patógenos compitiendo por los alimentos esenciales o por los sitios del accesorio epitelial. Produciendo compuestos antimicrobianos, ácidos grasos volátiles, y ácidos de bilis químicamente modificados, las bacterias indígenas del intestino también crean un ambiente local que es generalmente desfavorable para el crecimiento de los patógeno entéricos. Este fenómeno se llama Resistencia a Colonizacion, que puede ser definida como la capacidad de los microorganismos que pertenecen a la microflora normal del intestino para impedir la implantación de patógenos. Esta función de la microflora también se conoce como el efecto de la barrera. Mientras que las bacterias probióticas mejoran la resistencia de la colonización y actuan como remedio natural, el pensamiento en consenso es que la importancia de las bacterias del ácido láctico como agentes probióticos impacta más en los mecanismos indirectos tales como immunomodulacion.

La microflora normal o indígena del hombre consiste en una parte residente, que permanece en gran parte con el organismo del anfitrión, y una parte transitoria, que puede cambiar dinámicamente en su composición. Esto no es único para el hombre pues también se aplica a los animales. El volumen de la parte transitoria de la microflora de la zona digestiva depende tanto de la composición de la flora o de la resistencia a la colonización, y del grado de contaminación (cualitativo y cuantitativo también) del alimento y de las bebidas injeridas. En relación con estas últimas, las condiciones higiénicas del ambiente es importante.

Los sistemas de defensa en el intestino se pueden dividir en tres partes: la flora del intestino, la mucosa del intestino y el epitelio y el sistema inmune relacionado.

El intestino, integrado por vellosidades y criptas, está cubierto con moco que protege las células intestinales. En la parte inferior de las criptas existen las células especializadas conocidas como células de Paneth que puedan lanzar moléculas antimicrobianas en el lumen del intestino. La flora intestinal, presente principalmente en el colon, forma una barrera natural a los patógenos. El sistema inmune intestinal abarca las células diseminadas debajo del epitelio y también entre las células epiteliales (linfocitos intraepiteliales). Los linfocitos también se encuentran dentro de más estructuras organizadas, folículos linfoides, con una región central de linfocitos de B y de linfocitos laterales de una región. Sobre estas estructuras, encontramos las células M, que se especializan en el transporte de partículas al folículo. Estas áreas del intestino se conocen como 'parchos de Peyer'. Cuando un linfocito es activado por una célula dendrítica que presenta un antígeno, deja la mucosa en linfa y entra en la circulación sanguínea vía el canal torácico. Este linfocito activado entonces coloniza la misma mucosa u otros sitios de la mucosa.

lunes, 20 de julio de 2009

Lácteos que ayudan en el estreñimiento

Deben ir de la mano con una dieta más sana y rica en fibra para mejorar problemas intestinales.

La tecnología en alimentos ha dado pasos gigantescos en los últimos años, lo que facilita la vida de las personas y ayuda en la superación de algunos problemas.

Este es el caso del estreñimiento, o problemas para evacuar el intestino (defecar), que por las rutinas alimenticias y la vida moderna es casi una epidemia.

En la actualidad, dos productos lácteos comerciales ofrecen una oportunidad para solucionar este problema, utilizando culturas probióticas, pero nada asegura su éxito por sí solos. Los productos que tienen probióticos son complementarios en cualquier camino para poner fin al estreñimiento.

Lo más indicado para superar este problema es consumir frutas y verduras, aunque algunos hidratos de carbono que no se absorben, se usan para mejorar este problema intestinal. Otro camino son medicamentos que no se deben a menos que sea bajo indicación médica.

Los productos lácteos que se promocionan como remedios naturales para el estreñimiento utilizan dos términos: actiregularis y biobalance. Los actiregularis es un bifidobacteria que es considerada un probiótico con efectos positivos en el equilibrio de la flora intestinal y reducen los sintomas de malestar gastrointestinal.

El biobalance es un concepto donde se mejoran los parámetros de vida a través de los alimentos, especialmente por el agregado de fibra, que mejora el tránsito intestinal al ser agregado en cantidades suficientes.

Lo que sucede es que las personas con constipación o estreñimiento tienen generalmente hábitos alimentarios inadecuados y consumen muy poca fibra, lo que se relaciona con problemas de aumento de peso. Una persona que consume altos contenidos de fibra en su dieta, lo más probable es que no tenga problemas de aumento de peso.

viernes, 17 de julio de 2009

Beneficios de los probióticos


Los efectos beneficiosos de cepas probióticas incluyen lo siguiente:

1. Valor alimenticio creciente (una mejor digestibilidad, absorción creciente de vitaminas y minerales);

2. Promoción de la digestión intestinal de la lactosa;

3. Influencia positiva en la flora intestinal y urogenital (antibióticos y colitis, infecciones de levadura y vaginitis inducidos por radiación en mujeres);

4. Prevención y reducción de las infecciones en la zona intestinal (bacterias o enteritis inducida por virus, candida, píloros de Helicobacter);

5. Regulación de la movilidad de los intestinos (estreñimiento, síndrome de intestino irritable);

6. Incidencia y duración disminuidas de la diarrea (asociado antibiótico, clostridium difficile, viajeros, y rotaviral);

7. Mantenimiento de la integridad de la mucosa intestinal;

8. Mejora del sistema inmune;

9. Prevención del cáncer de colon;

10. Reducción de los productos catabólicos eliminados por el riñón y el hígado;

11. Prevención de la osteoporosis;

12. Un mejor desarrollo (crecimiento);

13. actividades Anti-carcinógenas, anti-mutágenas y antialérgicas;

14. Sensación de bienestar;

15. Características de la Anti-Candida;

16. Encefalopatía hepática;

17. Regulación de condiciones inflamatorias tales como enfermedad del intestino (enfermedad y colitis ulcerosa de Crohn);

18. Reducciones y eliminación del crecimiento excesivo bacteriano del pequeño intestino;

19. Alivio de infecciones de la zona urinaria;

20. Influencia positiva en niños autísticos;

21. Proporciona el ambiente antagónico para los patógeno;

22. Bloqueo de sitios de adherencia de patógeno;

23. Hacer inactivo enterotoxinas.

Efectos clínicos divulgados por probióticos

Estímulo inmune

Lactobacilo acidófilo, L. casei, L. rhamnosus, L. plantarum, L. delbrueckii, L. johnsonii, Bifidobacterium bifidum

Diarrea Antibiótico-asociada

L. rhamnosus, L. acidophilus. L. bulgaricus, Saccharomyces boulardii, B. longum, Enterococcus faecium

Diarrea de los viajeros

L. rhamnosus, L. acidophilus. L. bulgaricus, B. bifidum, Streptococcust hermophilus, L. johnsonii, S. boulardii

Colitis recurrente de C.difficile

L. rhamnosus, S. boulardii

Antitumores

L. acidophilus, L. casei, L. plantarum, L. delbrueckii, L. gasseri, B. longum, B. bifidum, B. adolescentis, B. infantis

Diarrea de Rotavirus

L. rhamnosus, B. bifidum, S. thermophilus

Diarrea aguda

B. bifidum, L. bulgaricus, S. thermophilus, L. acidophilus, E. faecium, L. rhamnosus, L. reuteri

Equilibrio de la microbiota intestinal

L. acidophilus, L. casei, B. bifidum, L. plantarum

Intolerancia de lactosa

L. bulgaricus, S. thermophilus, L. rhamnosus, L. johnsonii

Baja de actividades enzimáticas fecales

L. rhamnosus, L. casei, L. gasseri, L. delbrueckii, L. acidophilus

Los probioticos juegan un papel importante en la nutrición humana y la salud, y en mantener el equilibrio de la microflora intestinal naturalmente.

Los probioticos son ampliamente utilizados en muchos países por consumidores y en la práctica clínica, y sus ventajas contra la enfermedad se están investigando extensivamente, especialmente en las últimas décadas. La necesidad de encontrar acercamientos terapéuticos y remedios naturales para el reemplazo de superar efectos secundarios, se asoció a los tratamientos farmacológicos actuales, y la necesidad de nuevos antimicrobianos debido al abuso de antibióticos, ha propulsado la investigación sobre probioticos contra una multiplicidad de desordenes dados sus perfiles de seguridad favorables.

Progresos adicionales en el campo de suplementos probioticos requieren la cooperación entre los microbiólogos, gastroenterólogos, inmunologos, nutricionistas y tecnólogos del alimento, reflejando la naturaleza multidisciplinaria de la investigación alimentaria funcional.

miércoles, 15 de julio de 2009

Equilibrio del Ecosistema Intestinal con Probióticos

La condición y la función del aparato gastrointestinal es esencial para nuestro bienestar. Después de las vías respiratorias, la zona gastrointestinal constituye la segunda superficie mayor del cuerpo, comparable de tamaño a un campo de tenis. Durante el curso de una vida normal, cerca de 60 toneladas de alimento pasan a través de este canal.

La microflora intestinal humana es altamente importante para el anfitrión por varias razones. En primer lugar, la microflora beneficia al anfitrión aumentando la resistencia a la nueva colonización así como en la protección contra el crecimiento excesivo de los organismos potencialmente patógenos ya-presentes. Otra funcion importante para el anfitrión son la alta actividad metabólica de la flora intestinal. El grado de esta actividad se ha estudiado por ser similar a la del hígado. La administración de agentes antimicrobianos es la causa más común de la interrupción del equilibrio de la microflora normal y lleva a la resistencia disminuida a la colonización y alteraciones en las actividades metabólicas de la flora intestinal.

Por millares de años las culturas microbianas se han utilizado para fermentar los alimentos y para preparar las bebidas alcohólicas. En génesis, las referencias se hacen a la preparación de la leche fermentada. Los microorganismos fueron utilizados en el siglo XIX como remedio natural para prevenir y para curar enfermedades, y agregados a la alimentación del animal doméstico para realzar el crecimiento. Es probable que los primeros gravámenes científicos de probioticos fueron hechos en 1908, basado en el trabajo del laureado ruso Elie Metchnikoff del Premio Nobel. Él primero presumió que una alta concentración de lactobacilos en la flora intestinal era importante para la salud y la longevidad en seres humanos. De hecho, ahora sabemos que la flora intestinal desempeña un papel importante en la salud como remedio natural: estimulando el sistema inmune, protegiendo el anfitrión contra bacterias y virus invasores, ayudando a la digestión y a la asimilación del alimento. Con todo, la importancia de estas bacterias en la zona gastrointestinal se ha descuidado durante mucho tiempo, mientras que el foco fue puesto simplemente en patógeno entéricos y otros factores que llevan a desordenes gastrointestinales.

La composición de la flora gastrointestinal es diferente entre individuos, y también durante la vida del mismo individuo. Muchos factores, tales como dieta o clima, envejecimiento, medicación (especialmente antibióticos), enfermedad, tensión, pH, infección, localización geográfica, raza, circunstancias socioeconómicas, forma de vida pueden trastornar este equilibrio. Las interacciones de bacterias intestinales típicas pueden también contribuir a la estabilización o a la desestabilización. Un estado de balance dentro de la población microbiana dentro de la zona gastrointestinal se puede llamar "eubiosis" mientras que un desequilibrio se llama "dysbiosis". Para el balance óptimo de la flora intestinal, las bacterias beneficiosas, tales como los lactobacilos y los Bifidobacteria grampositivos, deben predominar, presentando una barrera a los organismos invasores. Alrededor de 85% de la microflora intestinal en una persona sana deben ser buenas bacterias y 15% bacterias malas. Cuanto mayor sea el desequilibrio, mayores son los síntomas. El uso de suplementos probioticos como remedio natural puede ser el acercamiento más natural, más seguro y común para mantener el equilibrio del ecosistema intestinal.

lunes, 13 de julio de 2009

Probioticos y la intolerancia a la lactosa


La inhabilidad de adultos de digerir la lactosa, o el azúcar de la leche, es una condicion mundial. La gente de descendencia europea es única en la retención de la capacidad de producir la enzima de digerir la lactosa, lactasa, al llegar a la edad adulta. El consumo de lactosa por aquellos que carecen de niveles adecuados de lactasa en el pequeño intestino, puede dar lugar a síntomas de diarrea, hinchazón, dolor abdominal y flatulencia. Estos síntomas son debido a la lactosa indigerida que alcanza el intestino grande y que es fermentada por los microbios colónicos. Estos microbios pueden producir gases y los productos que llevan a la diarrea.

La inhabilidad de consumir comfortablemente los productos lácteos no sólo limita la libertad de elegir los alimentos, pero también potencialmente compromete el consumo del calcio, amenazando a la salud de los huesos. Se ha documentado científicamente que muchos individuos intolerantes a la lactosa pueden consumir productos lácteos fermentados, tales como yogur, con pocos síntomas que la misma cantidad de leche sin fermentar, aunque el yogur contiene la cantidad casi igual de lactosa como la leche. Se encontro que el yogur ayuda a la digestión de la lactosa porque las bacterias usadas para hacer el yogur, entregan lactasa al pequeño intestino, donde la lactosa se digiere antes de que alcance el colon. Además de bacterias del yogur, L. acidófilo y las bifidobacterias han demostrado en varios estudios que mejoran la digestión de la lactosa.

viernes, 10 de julio de 2009

Resumen de cepas probióticas

Los productos probióticos comerciales no especifican siempre la cepa del microorganismo que contienen. Cuando lo hacen, puede ser una cepa que nunca se ha estudiado científicamente, o se ha estudiado pero no se identificó ninguna ayuda contra enfermedad.

Hay docenas de microorganismos que han demostrado tener calidades probióticas deseables, por lo menos in vitro. Sin embargo, las bacterias injeridas mueren normalmente en el estómago. Una pequeña cantidad de cepas han demostrado colonizar la zona gastrointestinal humana en ensayos clínicos. Esto es probablemente un requisito previo necesario para que cualquier ayuda contra enfermedad sea conferida. Algunas cepas han demostrado que colonizan la zona gastrointestinal y que confieren ventajas específicas en ensayos clínicos humanos. Ésta es la variedad más creíble de probiótico.

Cepas de investigación: Cualesquiera estudiado generalmente como microorganismo seguro que se ha estudiado para el uso probiótico, pero no disponible en el comercio en cualquier mercado.

Cepa comercial: Una cepa producto en una escala industrial para uso comercial, como un producto fresco (leche o jugo fermentados) o suplemento alimenticio (cápsulas o pastillas).

Cepa probiótica: Mirado generalmente como un microorganismo seguro (tal como lactobacilos, bifidobacteria, estreptococos, sacharomycis, etc) demostrado en la investigación publicada para tener uno o más efecto positivo:

1. Adherencia in vitro a las células epiteliales.

2. Actividad antimicrobiana in vitro.

3. Resistencia in vitro a la bilis, al ácido hidroclórico, y al jugo pancreático.

4. Actividad de anticarcinogenica (reducción de agentes carcinógenos) en ensayos clínicos.

5. Modulación o estímulo inmune en ensayos clínicos humanos.

6. Reducción de la permeabilidad intestinal en ensayos clínicos humanos.

7. Colonización de la zona gastrointestinal en estudios clínicos humanos.

Cepa implantable: Cualquier cepa microbiana en la zona gastrointestinal del hombre (es decir lactobacilos o bifidobacteria) demostrada para sobrevivir el paso a través de la zona gastrointestinal (aparezca vivo en la excreta) o para persistir en las biopsias de la mucosa intestinal después de la cesación de alimentos.

Cepa clínica: Una cepa implantable que ha demostrado tener una o más ventajas contra la enfermedad, y por lo tanto ha demostrado utilidad clínica. Algunos ejemplos de ventajas que se han demostrado son la permeabilidad intestinal reducida (LGG), realce de la función inmune (varias cepas), y tratamiento de la infección.

miércoles, 8 de julio de 2009

Historia de la investigación probiótica


En el final del siglo XIX, una escuela de pensamiento sostuvo que la mala salud comienza en el colon, con un proceso de "auto-intoxicacion". Los residuos y las toxinas del colon se filtraron en la circulación sanguínea e iniciaron las enfermedades de la edad avanzada. La reducción de la putrefacción en el colon se convirtió en una meta de algunas terapias, tales como regímenes dietéticos.

La fermentación de la carne en embutidos usando bacterias de ácido láctico preserva la carne contra la descompocision. Estas bacterias, que son inofensivas a la zona gastrointestinal del hombre, pudieron beneficiarle reduciendo la putrefacción en la zona gastrointestinal, o así es que la teoría lo explica.

Lactobacilos como probioticos

Los lactobacilos han demostrado estar presentes en la zona gastrointestinal de la mayoría de los seres humanos sanos. No son patógenos, y se han utilizado en la fabricación de embutidos y otros alimentos fermentados por siglos. Bajan el pH de su ambiente al convertir el azúcar al ácido láctico, que inhibe el crecimiento de algunos patógenos. Los lactobacilos fueron el primer género de bacterias sospechosas para ayudar contra las enfermedades, en vez de ser agentes de la enfermedad.

El lactobacilo acidófilo, encontrado en yogur, se creyo era responsable de la longevidad de algunos europeos que la consumian tradicionalmente como alimento principal. Esto apoyó la discusión de que los lactobacilos tenían un efecto positivo sobre la salud humana. El lactobacilo acidófilo fue utilizado bajo la forma de leche acidófila para tratar el estreñimiento y la diarrea en los años 20 y los años 30 en los E.E.U.U. Fue administrado extensamente, a menudo con resultados positivos.

El lactobacilo acidófilo se ha utilizado en tres estudios humanos para reducir las poblaciones de la candida en el tracto gastrointestinal, demostrando resultados positivos.

lunes, 6 de julio de 2009

Los veterinarios favorecen los probioticos para aliviar el malestar en perros


Un número creciente de veterinarios está prescribiendo el suplemento de bacterias amistosas (probioticos) para los perros. Todos los dueños de perros que han tenido que limpiar, saben que no son los únicos que experimentan desordenes gastrointestinales.

Muchos animales también sufre de aflicciones digestivas de breve duración y crónicas. Consecuentemente, algunos veterinarios han comenzado a prescribir suplementos probioticos para aliviar síntomas relacionados tales como diarrea, vomitos, gas y hincharse.

Problemas gastrointestinales son el segundo problema de salud mas común en perros después de enfermedades de la piel. Las causas comunes incluyen parásitos tales como anquilostoma, whipworm y giardia así como "indiscreción dietética, lo que podría significar cualquier cosa de desechos consumidos de la basura.

Los perros pueden también sufrir de diarrea crónica, proviniendo un desequilibrio bacteriano de la infección tal como salmonela, Campylobacter o Escherichia Coli.

Para resolver condiciones agudas y crónicas del tracto gastrointestinal, algunos veterinarios ahora están recetando suplementos probioticos que pueden asistir a la digestión y ayudar a apartar enfermedades gastrointestinales en animales así como en la gente.

Procter and Gamble fabrica un suplemento probiótico suave, masticable llamado Prostora máximo conteniendo una cepa especial de Bifidobacterium animalis que mata las bacterias que causan salmonela y Clostridium difficile en estudios de laboratorio. Los resultados de un estudio clínico a ser publicado sugieren que la bacteria ayuda a detener la diarrea en varias castas caninas.

El estudio reciente incluyó a 31 perros que sufrian de diarrea. A 13 perros que le fue dado probioticos, se recuperaron cerca de 40 por ciento más rápido - en cuatro en vez de siete días - que lo hicieron los otros animales.

Mientras tanto, Purina ha desarrollado un producto llamado Fortiflora que contiene Enterococcus faecium que puede realzar las inmunorespuestas en los perros. La investigación sugiere que tomar E. faecium lleve a concentraciones más altas en la sangre de ciertos anticuerpos que luchan contra los patógenos.

miércoles, 1 de julio de 2009

Probioticos para realzar el sistema inmune

El sistema inmune defiende contra los patógeno microbianos que se han incorporado a nuestros cuerpos. El sistema inmune es extremadamente complejo, utilizando defensas basadas en celulas y anticuerpos contra los agentes infecciosos potenciales.

La inmunodeficiencia puede resultar de ciertas enfermedades (e.g., cáncer, SIDA, leucemia) o, en un grado inferior, de condiciones más normales tales como edad avanzada, embarazo, o tensión. Las enfermedades autoinmunes (e.g., alergias, artritis reumatoide, enfermedades de intestino inflamatorias) también pueden ocurrir debido a la actividad mal dirigida del sistema inmune.

Las culturas probióticas han demostrado en una variedad de pruebas que estimulan ciertas funciones celulares, bioquímicas y anticuerpos del sistema inmune. Estudios en animales y algunos estudios humanos han demostrado un efecto de las bacterias del yogur o del ácido láctico sobre el aumento de los niveles de ciertas células immunoreactivas (e.g. macrófagos, linfocitos) o sobre la regulación de los factores inmunes (cytokines, inmunoglobulinas, interferón). Además, algunos estudios han demostrado la supervivencia mejorada de animales de laboratorio infectados por patógenos que consumían culturas probióticas con respecto a los animales que consumían una dieta de control.

Los resultados acumulados hasta ahora sugieren que los probioticos pueden proporcionar una herramienta adicional para ayudar a su cuerpo a protegerse. Un campo de investigación emocionante ha estado documentando la capacidad de ciertas bacterias probióticas de modular el sistema inmune. Los estudios han demostrado que los probioticos son eficaces en la disminución del desarrollo de la alergia y de la recaída de la enfermedad de intestino inflamatoria.