viernes, 30 de octubre de 2009

Probioticos y alergias

Algunos estudios prospectivos muestran la posibilidad de usar probióticos en fases iniciales de la vida, para mejorar los síntomas de la enfermedad atópica en lactantes con riesgo de presentar alergias. Por otro lado, parece ser que los probióticos pueden modular la respuesta inflamatoria intestinal y mostrar un posible efecto clínico en algunas patologías como la colitis ulcerosa y la enteritis regional.

Hay estudios que no encuentran efectos favorables de los probióticos y otros que los encuentran con un probiótico y con otro no, por lo que es necesaria una mayor investigación en este terreno. El problema es que, detrás de todos estos estudios, siempre hay intereses económicos que pueden confundir al consumidor.

Esto es lo que explica la reciente guerra del yogur. Yogur es la leche fermentada con dos tipos de gérmenes: Streptococcus thermophilus y Lactobacillus bulgaricus. Si posteriormente el producto se pasteuriza, se eliminan estos microorganismos y se obtiene el yogur pasteurizado después de la fermentación, que se puede conservar fuera de la nevera y tiene una fecha de caducidad más amplia.

En la actualidad no hay unanimidad sobre en qué medida los microorganismos del yogur y otras leches fermentadas son capaces de resistir las condiciones adversas del tracto gastrointestinal, llegar viables al intestino grueso y, allí, ser lo suficientemente competitivos para colonizarlo, mantenerse activos y ejercer los efectos beneficiosos que se les atribuye. Algunos expertos afirman que el consumo de 8 yogures semanales nos puede aportar ya algún beneficio en nuestra salud.

En cualquier caso, sí parece haber total coincidencia en que, para que se puedan manifestar estos efectos beneficiosos, debe haber un consumo regular y prolongado. Además, dado que no se conocen efectos adversos derivados de la ingestión de estos productos, el consumidor, por lo menos, obtendrá otros valores nutritivos que sí están claramente demostrados. A pesar de todo ello, la industria sigue buscando otras cepas que sean resistentes al tracto gastrointestinal y demostrar que sí pueden ejercer un efecto probiótico.

Por ejemplo, en Estados Unidos existe una amplia gama de suplementos dietéticos de este estilo, entre los que actualmente destacan los que contienen Lactobacillus GG, que ha demostrado efectos beneficiosos en dosis de 1010 unidades formadoras de colonias (UFC) y Lactobacillus reuteri que también se comercializa en dosis de 1010 UFC.

Cabe destacar que el ámbito de los prebióticos y los probióticos es muy prometedor, y sus distintas aplicaciones apuntan a la prevención de afecciones de alta prevalencia en las sociedades desarrolladas, como son las alergias y el cáncer. Hasta el momento, el número de estudios científicos rigurosos que encuentran efectos beneficiosos por el consumo regular de estos productos es muy elevado, y el interés en profundizar en este ámbito es creciente. Sin embargo, la inclusión de estos alimentos en la alimentación no excluye que ésta deba ser adecuada.

En cualquier caso, la ingestión de alimentos prebióticos o probióticos debe hacerse en el marco de una alimentación variada y equilibrada. Sólo de este modo estos productos pueden ayudar a conseguir una correcta nutrición y una mejor calidad de vida de los individuos.

lunes, 26 de octubre de 2009

Probioticos, Cáncer y Colesterol

Previene el Cáncer

Estudios epidemiológicos recientes han encontrado una relación inversa entre el riesgo de presentar diversos tipos de cáncer y el consumo de dietas que incluyen alimentos probióticos. Éstos pueden reducir las enzimas que transforman los procarcinógenos en carcinógenos e inhibir el desarrollo de tumores malignos.

Reduce la concentración de colesterol en sangre

El mecanismo podría ser debido a que los ácidos grasos de cadena corta pueden alterar la síntesis de colesterol. Además, las bacterias pueden conjugar ácidos grasos biliares y facilitar su eliminación a través de las heces.

La disminución enterohepática de ácidos biliares hace imprescindible que el hígado retire colesterol de la circulación para poder sintetizar más sales biliares. Sin embargo, los estudios que han demostrado estos efectos de disminución del colesterol han utilizado dosis de yogur «irreales» (> 2 litros al día).

viernes, 23 de octubre de 2009

Efectos beneficiosos que pueden ejercer los probióticos sobre el organismo

• Mejora de la digestibilidad de la lactosa

• Regulación del tránsito intestinal

• Mejora de la respuesta inmunitaria

• Puede «ayudar» a prevenir el cáncer

• Regulación de los valores de colesterol plasmáticos

• Modulación de las enfermedades atópicas

lunes, 19 de octubre de 2009

Digestibilidad de la lactosa y los probioticos

En general, el yogur y las leches fermentadas con probióticos son mejor toleradas que la leche por las personas intolerantes a la lactosa. Una buena parte de la población adulta presenta esta intolerancia a la lactosa, que se debe a una disminución de la actividad de la enzima lactasa en la mucosa intestinal. La lactosa no digerida produce un efecto osmótico y, al llegar al intestino grueso, es fermentada por la biota nativa, lo que da lugar a la síntesis de ácidos grasos de cadena corta (acetato, lactato, butirato) y gas (CO2, metano e hidrógeno).

Esta secuencia da lugar a los síntomas de la intolerancia: flatulencia, dolor abdominal y diarrea.

La mayoría de probióticos sintetizan beta-galactosidasa, que también puede hidrolizar a la lactosa, con lo que pueden ayudar a paliar estos síntomas.

viernes, 16 de octubre de 2009

Mejora de la respuesta inmunitaria con probioticos


Se ha demostrado en animales que el tejido linfoide asociado al intestino aumenta su capacidad de respuesta a patógenos, cuando el intestino recibe probióticos durante un tiempo continuado.

Los probióticos, además de frenar el desarrollo de patógenos, refuerzan la acción del intestino
como barrera, con lo que evitan que los microorganismos perjudiciales puedan pasar al torrente circulatorio. También aumentan la actividad de linfocitos y macrófagos, y estimulan la respuesta inmunitaria humoral al aumentar la producción de a-interferón (con efectos antivíricos, profilácticos y activadores de las células NK), lo que mejora la permeabilidad intestinal alterada con la inflamación.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Estreñimiento y los probioticos

Algunas leches fermentadas con bifidobacterias son capaces de reducir el tiempo de tránsito intestinal entre un 10 y un 22%, dependiendo de la dosis, lo que es beneficioso para las personas que tienen tendencia a presentar estreñimiento. Por otro lado, también modulan el tránsito a las personas que tienen tendencia a presentar diarreas.

Así, se ha observado en numerosos estudios que existe una menor incidencia de episodios, y una menor duración de éstos, en personas que ingieren probióticos, tanto en diarreas infantiles, diarrea del viajero, la asociada con el consumo de antibióticos o la causada por la maldigestión de la lactosa.

Un metaanálisis reciente de 9 estudios ha demostrado una disminución de entre el 61 y el 65% del riesgo de diarrea asociada a antibióticos.

lunes, 12 de octubre de 2009

Los probióticos prevendrían los resfríos infantiles


En un estudio en China, los niños pequeños que bebieron una mezcla de bacterias probióticas, con leche dos veces por día durante el invierno y la primavera padecieron menos resfríos, necesitaron menos antibióticos y perdieron menos días de clase que otros niños que bebieron leche sola.

Trabajos previos habían demostrado que los probióticos pueden ayudar a personas que padecen varias enfermedades, ya que esas bacterias refuerzan la respuesta inmunológica a los invasores. Pero se desconoce si son tan efectivas para prevenir dolencias.

El estudio efectuado en China incluyó a 326 niños, de entre 3 y 5 años, que al azar integraron tres grupos: uno tomó leche con la bacteria Lactobacillus acidophilus; otro recibió el mismo organismo pero con una cepa de otra bacteria, Bifidobacterium animalis y el último sólo bebió leche con un placebo (controles).

Los niños tomaron las fórmulas de prueba dos veces por día, entre noviembre del 2005 y mayo del 2006. La supervisión estuvo a cargo de personal de la escuela durante la semana y de los padres/tutores durante los fines de semana.

En la revista Pediatrics, los autores publicaron que, a diferencia del grupo tratado con placebo, los niños que ingirieron el Lactobacillus tuvieron un 53 por ciento menos resfríos, un 41 por ciento menos tos y un 28 por ciento menos mucosidad.

En cambio, el grupo tratado con Lactobacillus/Bifidobacterium tuvo muchos menos síntomas: un 72 por ciento menos fiebres, un 62 por ciento menos de tos y un 59 por ciento menos mucosidad.

Eso significó, por ejemplo, 66 casos de fiebre en el grupo de control, 31 en la cohorte tratada con Lactobacillus solamente y 18 en el grupo tratado con la combinación probiótica. Todas las cohortes tuvieron el mismo tamaño, con unos 100 niños.

Asimismo, cuando los niños tratados con los probióticos tuvieron fiebre, tos o mucosidad, se recuperaron significativamente más rápido que el grupo de control.

Además, la duración de la enfermedad se redujo un 32 por ciento con el Lactobacillus y un 48 por ciento con la combinación Lactobacillus/Bifidobacterium.

El equipo señaló también que, comparado con el grupo de control, el uso de antibióticos fue un 68 por ciento menor en los participantes tratados con Lactobacillus y un 84 por ciento menor en los que tomaron Lactobacillus/Bifidobacterium.

Por último, los autores explicaron que los niños tratados con los probióticos faltaron a la guardería o la escuela entre un 28 y un 32 por ciento menos que los controles.

El equipo dirigido por el doctor Gregory J. Leyer, de Danisco, opina que los probióticos reducirían la necesidad de medicamentos, cuyo uso en pediatría está recibiendo especial atención.

Aun así, Leyer señaló algunas cuestiones. "No todos los probióticos son lo mismo (...) no todos hacen todo", dijo a Reuters Health. Algunas cepas, por ejemplo, son efectivas contra las alergias o para prevenir la diarrea.

Para el estudio, comentó, el equipo usó "organismos (y dosis) cuidadosamente seleccionados" para "prevenir el resfrío y la gripe". Eso sugiere que los resultados no serían aplicables a otras bacterias o enfermedades.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Mejore su salud intestinal con alimentos prebióticos

Prebióticos son aquellos alimentos que contienen sustratos que nutren la microflora intestinal beneficiosa para el huésped. Son ejemplos de estos alimentos la fibra alimentaria, en concreto los fructooligosacáridos (FOS), que están actualmente muy de moda. Éstos están formados por azúcares simples de cadena corta (de 3 a 10 unidades de azúcar), de las que por lo menos 2 son fructosa.

Se dividen en tres categorías, según el número de unidades de fructosa que contienen. Los enlaces de estos azúcares no pueden ser hidrolizados por las enzimas del intestino delgado, de manera que no pueden ser absorbidas por éste y pasan al intestino grueso, en el que pueden estimular selectivamente el crecimiento de bacterias beneficiosas, como las bifidobacterias y Lactobacillus, lo que da lugar a una reducción de bacterias patógenas como Salmonella y Clostridium.

Algunos estudios han demostrado que una ingestión elevada de FOS puede disminuir la actividad glucuronidasa beta, enzima del intestino que puede convertir a los procarcinógenos en carcinógenos. Encontramos FOS en la miel, la cerveza, cebolla, espárragos, centeno, avena, alcachofas, plátanos y la chicoria. Otros componentes de la fibra alimentaria como la pectina, la hemicelulosa y la inulina también funcionan como prebióticos y estimulan la producción de ácidos grasos de cadena corta.

El contenido de FOS es muy variable y puede ir desde un 1-4% en el trigo a un 20% en la chicoria. La dife-rencia entre los distintos tipos de FOS está en el grado de polimerización. Todos ellos se pueden utilizar en una amplia gama de productos, tanto por sus propiedades tecnológicas como nutricionales.

Tecnológicamente se utilizan como texturizantes, ligantes de agua y, sobre todo, como sustitutivos de las grasas y azúcares (juntamente con edulcorantes), lo que sirve para dar consistencia a distintos «productos bajos en calorías». Se suelen encontrar, entre otros, en productos lácteos, productos de panadería, en helados y salsas light.

Desde el punto de vista nutricional, desde hace unos años, se promocionan suplementos o alimentos ricos en inulina u otros FOS por sus propiedades prebióticas. Éstos llegan al colon intactos, porque resisten la hidrólisis estomacal y la digestión en el intestino delgado. Allí, son fermentados por la microflora colónica y dan lugar a ácidos grasos de cadena corta, que al absorberse sólo aportan 1,5 kcal/g (de aquí su bajo valor calórico). Así, el consumo de FOS además de no aportarnos muchas calorías tiene un efecto prebiótico, porque modula la flora intestinal de forma beneficiosa.

Este efecto tiene, a su vez, otras consecuencias fisiológicas,
tanto en el colon como sistémicas. Una de ellas es el efecto sobre la absorción de minerales, como por ejemplo el incremento de la absorción de calcio y magnesio, lo que repercute positivamente en la salud de los huesos y dientes, entre otros. Sin embargo, estos efectos son muy controversiales y necesitan ser demostrados en estudios clínicos bien diseñados.

En general, se acepta que se debe consumir más de 2 g diarios de estos FOS para percibir sus efectos prebióticos, lo que es difícil de conseguir con una dieta convencional. Lo que sí está claro es que el uso de productos enriquecidos no debería nunca sustituir el consumo de fibra contenida «naturalmente» en frutas y verduras.

lunes, 5 de octubre de 2009

Ecología intestinal

La microflora intestinal está formada por 100 billones de bacterias de aproximadamente 400 especies distintas. El intestino grueso, en concreto, es el que alberga el 95% de las bacterias de nuestro cuerpo. La microbiota intestinal se empieza a constituir tras el nacimiento. Las primeras bacterias que colonizan el tubo digestivo son aeróbicas, principalmente E. coli y otras del género Lactobacillus.

Posteriormente, y de modo progresivo, se van estableciendo especies anaerobias, en especial los géneros Bacteroides, Clostridium, Eubacterium y Bifidobacterium. A partir de los 2 años de vida la microflora que se ha establecido es casi definitiva y permanece muy estable durante la vida del individuo. Evidentemente, puede haber alteraciones transitorias derivadas del uso de antibióticos o de cambios en la alimentación, pero éstas suelen ser reversibles.

En un intestino con un funcionamiento óptimo conviven en equilibrio poblaciones de bacterias beneficiosas (bifidobacterias, Lactobacillus, E. coli no patogénica) con otras patógenas (E. coli hemolítica, Clostridium perfringens, Campilobacter, Listeria).

Actualmente, se sabe que un desequilibrio en esta microflora puede originar o favorecer el desarrollo de algunas enfermedades, como por ejemplo el cáncer. Se ha observado que los agentes potencialmente carcinógenos de algunos alimentos (pigmentos, aflatoxinas, pesticidas, nitritos) y otros agentes carcinógenos pueden ser bioactivados por sistemas enzimáticos de las bacterias intestinales. Esta bioactivación se ve favorecida cuando hay un desequilibrio en la microflora intestinal.

Por ello, es muy importante apoyar nutricionalmente a nuestras bacterias intestinales favorables, lo que se puede conseguir al ingerir dos tipos de alimentos: los prebióticos y los probióticos.

Los prebióticos son productos alimenticios no digeribles que estimulan el crecimiento de especies bacterianas simbióticas ya presentes en el colon. Por otro lado, los probióticos son aquellos alimentos o suplementos que contienen microorganismos vivos, que se pueden utilizar para modificar o mejorar el equilibrio bacteriano intestinal y favorecer la salud del huésped.

viernes, 2 de octubre de 2009

Salud con alimentos prebióticos y probióticos

En la actualidad los alimentos funcionales están muy presentes en nuestra alimentación. Algunos de ellos, como el yogur, se vienen utilizando desde hace muchos años y aún sigue siendo un elemento muy habitual de nuestra dieta, ya que posee muchas propiedades nutricionales.

Recientemente, sin embargo, los intereses comerciales han propiciado que se haya intentado confundir al consumidor. Actualmente, se está poniendo en duda si algunos alimentos realmente tienen los efectos probióticos que todo el mundo daba por supuestos.

Propiedades saludables de los probióticos

• Síntesis de vitaminas (B12, K, tiamina y riboflavina), ácidos grasos de cadena corta y proteínas, que en parte son absorbidos y utilizados por nuestras células

• Complementar el proceso digestivo y de absorción de nutrientes

• Protección frente a la infección por microorganismos patógenos, como bacterias y hongos

• Estimular y modular el sistema inmune

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Mejore su salud con....”Bacterias”


El sistema digestivo tiene normalmente mas de 400 especies de bacterias, algunas trabajan en armonía para el mantenimiento de nuestra salud.

A las bacterias buenas o “beneficiosas” se les llama también Probióticos y se definen como aditivos alimentarios de microorganismos vivos que apoyan la salud. Los probióticos han sido consumidos por centurias alrededor del mundo, en forma de alimentos fermentados o cultivados como yogur, queso cottage y leche de granos.

Hoy día, existe evidencia científica que da soporte a la habilidad de los probióticos para aumentar la resistencia del organismo a patógenos entéricos (intestinales), acelerar la recuperación del tracto gastro-intestinal después de un tratamiento con antibióticos, estimular el sistema inmune, mejorar el sistema urinario y asistir al aparato digestivo en la digestión de la lactosa.

Los primeros enunciados sobre el tema fueron anotados por Eli Metchnikoff (Premio Novel-1907), que introdujo la teoría que el colon contiene bacterias y consumiendo leche fermentada, la vida se puede prolongar y evitar la enfermedad.

Para ser considerado “probiótico”, la bacteria tiene que sobrevivir el medio acidico del estómago, colonizar el intestino delgado y grueso y actuar como una barrera en contra de bacterias patógenas. Adicionalmente, los probióticos ayudan en el metabolismo de los carbohidratos y la absorción de vitaminas en el tracto intestinal.

Los probióticos mas conocidos son el Lactobacillus, encontrado primariamente en el intestino delgado y la Bifidobacteria en el intestino grueso. Aunque existen estudios clínicos que apoyan los beneficios de los probióticos, mas estudios son necesarios en humanos.

El Lactobacilus acidófilus es uno de los probióticos mas populares y además de sus beneficios al tracto intestinal, se puede incluir lo siguiente:

* Producción de vitaminas del complejo B (B6, B12, ácido fólico, riboflavina, Niacina, Biotina y ácido pantoténico), mejora la absorción del calcio, produce enzimas como la lactasa, que ayuda a la digestión de la proteína de la leche (lactosa) y a mejorar los síntomas del Síndrome de Intestino Irritable, produce antibióticos naturales que ayudan en el control de bacterias patógenas intestinales, ayuda en la digestión de los alimentos y al control de la candidiasis intestinal.

El Acidófilus se puede consumir en forma de productos lácteos como el yogur, queso cottage y también se encuentra a la venta en las tiendas de remedios naturales en forma de liquido o cápsulas, que proveen una mayor concentración de la bacteria que la leche, el yogur con Acidófilus u otros productos lácteos cultivados.

Además del Lactobacilus acidófilus el yogur contiene otras dos clases de bacteria beneficiosa que son: el Lactobacilus bulgaricus y el Streptococcus thermophilus, que ayudan en la digestión de los carbohidratos de la leche, propiedad deseada para aquellas personas que sufren de intolerancia a la proteína de la leche (lactosa). Busque en la etiqueta del yogur las palabras: “cultivos vivos” (live cultures) o “cultivos activos” (active cultures) y evite productos que han sido calentados en su procesamiento, ya que el calor destruye las bacterias beneficiosas.

Muchas personas toman Acidófilus cuando viajan a otros países, como prevención para las infecciones intestinales y como ayuda para la recuperación del tracto digestivo, después de un tratamiento con antibióticos, especialmente antibióticos de amplio espectro. Es también recomendado a mujeres con infecciones vaginales repetitivas.

Para seleccionar adecuadamente el suplemento de probióticos, tiene que estar en refrigeración (liquido o cápsulas), las preparaciones de “secado por congelación” (freeze drying) son mas estables y mantienen sus propiedades por mas tiempo. Es recomendable revisar la fecha de expiración, porque si han estado almacenados por mucho tiempo, es posible que pierdan sus efectos beneficiosos.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Utilidad práctica de los probióticos en la salud

La principal utilidad de los probióticos es el tratamiento y la prevención de infecciones intestinales, aunque también han demostrado tener un papel importante en otras enfermedades digestivas no infecciosas así como en afecciones de otros órganos (alergias, eczemas, vaginitis .. .)

Actualmente, los probióticos han demostrado ser útiles y beneficiosos en:

* Tratamiento de diarrea aguda infecciosa en niños y adultos
* Prevención de la diarrea asociada a antibióticos en niños y adultos
* Algunas enfermedades inflamatorias intestinales (colitis ulcerosa, reservoritis)
* Mejora de los síntomas debidos a la mala digestión de la lactosa
* Mejora de algunos síntomas del síndrome del colon irritable
* Prevención de la enterocolitis necrotizante en recién nacidos pre-término

Otras situaciones en las que los probióticos podrían ser útiles en un futuro, pero donde aún se necesitan más estudios que avalen su eficacia, son:

* Disminución de los síntomas de asma y otras enfermedades de base alérgica
* Prevención de infecciones urinarias y del tracto genital, sobre todo en mujeres
* Prevención y disminución de la gravedad de las infecciones en recién nacidos prematuros
* Disminución de las complicaciones (sobre todo infecciosas) en pacientes ingresados en las unidades de cuidados intensivos
* Prevención de las infecciones en pacientes con cirrosis hepática
* Mejorar los síntomas en pacientes con artritis reumatoide y otras enfermedades reumatológicas de tipo inflamatorio.
* Prevención de la aparición de tumores
* Disminución de los niveles de colesterol

Por otro lado, en personas sanas el consumo de probióticos puede ayudar a mantener la salud por ejemplo en:

* Reducir el llanto en niños con cólicos del lactante
* Reducir los episodios de fiebre y diarrea en niños
* Reducir la duración de los resfriados pero no su frecuencia.

¿Son seguros?

La ingestión de un elevado número de miroorganismes viables obliga a investigar su seguridad. Desde un punto de vista teórico, al tratarse de microorganismos que normalmente forman parte de nuestra propia flora, difícilmente podrían causar problemas infecciosos. Aunque se ha descrito algún caso aislado de paso de gérmenes a la sangre en pacientes con el sistema inmunitario comprometido y en pacientes con enfermedades como la colitis ulcerosa, el perfil de seguridad de los probióticos más utilizados en los estudios realizados relacionados con el tema, debe considerarse satisfactorio. Hay que tener cuidado en administrar probióticos en pacientes gravemente inmunodeprimidos.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Bacterias beneficiosas

Lactobacillus acidophilus es una bacteria del género Lactobacillus. Se usa junto con el Streptococcus thermophilus en la producción del yogur y en suplementos probioticos.

El término Lactobacillus es la unión de un prefijo y una raíz: lacto que significa leche y bacillus que quiere decir en forma de barra o vara. Por otro lado, acidophilus quiere decir con afinidad por los ácidos. Esta bacteria crece, fácilmente, en medios mucho más ácidos que los ideales para otros microorganismos (pH 4-5 o menores) y crece en condiciones óptimas a unos 45 ºC.

El L. acidophilus crece de manera natural en una gran variedad de alimentos, incluidos la leche, la carne, el pescado y los cereales. Se puede consumir como remedio natural en suplementos probioticos. No solo está presente en los intestinos de los animales y en el del propio ser humano, sino también en la boca. El L. acidophilus absorbe la lactosa y la metaboliza formando ácido láctico.

Ciertas variedades genéticamente similares (conocidas como heterofermentivas) también producen etanol, dióxido de carbono y ácido acético como subproductos (hay que reseñar que el L. acidophilus produce exclusivamente ácido láctico). Como cualquier bacteria puede ser eliminada por un exceso de calor, humedad, o la luz solar directa.

Beneficios sobre la salud

El L. acidophilus se considera un probiótico o bacteria beneficiosa para el hombre. Este tipo de bacterias habitan en los intestinos protegiendo a sus poseedores del efecto nocivo de otros microorganismos. La degradación de nutrientes efectuada por este microorganismo produce ácido láctico, peróxido de hidrógeno y otros subproductos que crean un medio hostil para otros organismos indeseables.

El L. acidophilus consume los nutrientes de otros muchos microorganismos entrando en competencia con ellos y controlando, por la disminución de nutrientes, el desarrollo desmedido de estos. Durante la digestión, también ayuda en la producción de niacina, ácido fólico y vitamina B6 (piridoxina). Algunos estudios demuestran que el L. acidophilus puede ayudar a la desconjugación y separación de los aminoácidos por los ácidos biliares, que posteriormente pueden ser reciclados por el cuerpo.

lunes, 21 de septiembre de 2009

Lactobacilos, las bacterias que nos protegen.

Los alimentos probióticos no son otro que alimentos comunes, excepto que dentro de ellos, contienen microorganismos vivos en alta cantidad. Estos microorganismos tienen un poder como remedio natural para combatir ciertas dolencias como las diarreas, alergias, gripes y hasta algunos tumores.

Lo primero que tenemos que aclarar es en que consiste nuestra flora intestinal. La flora intestinal es un conjunto de microorganismos en su mayoria bacterias, algunas que resultan beneficiosas y otras que resultan dañinas para nuestro organismo.

Esta flora la tenemos desde nuestro nacimiento, pero a lo largo de la vida es normal que sufra diversos cambios provocados por los distintos hábitos alimenticios, enfermedades, uso de antibióticos y medicinas, etc.

Las funciones de este conjunto de bacterias son variadas y entre ellas podemos mencionar las de fermentar los residuos de los alimentos, estimular y regular el sistema inmunitario y actuar como barrera frente a las bacterias dañinas para nuestro organismo.

Los alimentos probióticos, tambien llamados alimentos funcionales, contienen microorganismos que, ingeridos, proporcionan efectos beneficios a nuestro cuerpo. Los mas comunes y conocidos son los que se incluyen en los productos lácteos, donde se añaden bacterias como los lactobacilos (lactobacillus), las bifidobacterias (bifidobacterium) y Streptococcus Termophillus entre otras. Esto es típico en las leches fermentadas, leches cultivadas, yogures con lactobacilus GG, cuajadas, quesos fermentados y otros casos muy publicitados. Tambien, puede obtener suplementos probioticos en forma de capsulas o tabletas.

Beneficios que aportan a nuestro organismo

* Regulación del funcionamiento intestinal: Los lactobacilos tienen la particularidad de adherirse sobre la pared intestinal impidiendo asi el asentamiento de bacterias dañinas. La diarrea aparece como consecuencia del aumento excesivo de bacterias perjudiciales y contra las que actuan los lactobacilos como protección. Al mismo tiempo, los lactobacilos combaten el estreñimiento acelerando el tránsito intestinal.

* Frente a algunos tipos de alergia: Se ha observado que los lactobacilos mejoran los síntomas de alergias y asmas, y tambien ayudan beneficiosamente en las patologías dermatológicoas como puede ser los eczemas.

* Como prevención contra la gripe: El lactobacilo Casei (L.Casei) tiene un comprobado efecto preventivo sobre el virus de la gripe.

* Refuerzo del sistema inmunológicos de personas que están expuestas a altos consumos calóricos, como atletas y ciertas profesiones. Lo observado es que ante la exigencia del esfuerzo físico, el sistema inmunológico se vería reducido. El consumo de alimentos con lactobacilos ha demostrado aumentar la respuesta inmune en esta gente.

La mas importante conclusión es la de incluir alimentos lacteos en nuestra dieta diaria. Todo el tiempo que estemos aportando sus propiedades al organismo, permanecerán sus efectos, aunque como estos se eliminan por vías naturales, se requiere del frecuente aporte de estos a través de suplementos probioticos para asegurar sus efectos.

viernes, 18 de septiembre de 2009

Salud gastrointestinal con remedios naturales


La flora intestinal puede ser afectada por una dieta pobre, estrés, consumo excesivo de alcohol, enfermedades, traumas, quemaduras, sepsis y cirugía mayor. El uso de antibióticos y ciertos medicamentos también producen alteraciones en la microflora intestinal.

Es muy importante mantener una óptima salud gastrointestinal. Además del sistema digestivo, el intestino desempeña un importante papel en el sistema inmunológico. La microflora intestinal es esencial para la efectividad de ambas acciones. Una de las funciones principales del intestino es absorber agua y nutrientes pero también tiene la capacidad de actuar como sistema de defensa. La pared intestinal actúa como barrera contra substancias y microbios dañinos. La microflora que alberga el intestino protege y estimula células especializadas del sistema inmunológico que ayudan a eliminarlos.

Los suplementos probióticos actúan de manera efectiva como remedio natural para apoyar la salud gastrointestinal, previniendo el deterioro intestinal y manteniendo la optima función del intestino.

Los prebioticos constituyen una fuente de energía para el tracto intestinal. Diferentes estudios han demostrado que suplementos prebioticos sirven para prevenir la atrofia de las vellosidades y alteraciones en la permeabilidad del intestino. También juega un papel importante en manmtener la salud de la flora intestinal.

El probiótico Lactobacillus reuteri combate los microbios que causan trastornos gastrointestinales y optimiza la flora intestinal. Produce acido láctico y acético que influencia el pH intestinal e inhibe el crecimiento de microorganismos nocivos.

Algunos suplementos probioticos proporcionan estos dos aliados, una combinación poderosa y única. Vienen suplementos probioticos en polvo, tabletas, liquidos o capsulas, fáciles de usar e ingerir.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

¿QUÉ ES UN PROBIÓTICO?

Hace casi un siglo el microbiólogo ruso Ilya Metchnikoff postulaba que algunas bacterias no son necesariamente perjudiciales para los humanos y que de hecho podian ser benéficas para su salud y bienestar. Y fue el primero que propuso la ingesta de las bacterias vivas contenidas en las leches fermentadas como forma de modular la flora intestinal y así evitar diversas enfermedades y alargar la vida. Sus investigaciones le valieron el Premio Nobel de Medicina en 1907.

Desde entonces, a partir de estas primeras aportaciones, la ciencia ha trabajado para conocer más de lo que hoy son llamados "probióticos" a los que Fuller definió en 1989 como "aquellos microorganismos vivos, principalmente bacterias y levaduras, que son agregados como suplemento en la dieta y que benefician al huésped mejorando el balance microbiano de su flora intestinal".

Estos microorganismos ingeridos a través de la alimentación logran llegar vivos al intestino delgado donde interaccionan con las bacterias de la microflora existente. Además colonizan el intestino grueso y estabilizan la flora intestinal al adherirse a la mucosa del intestino para impedir la actividad de microorganismos dañinos. Por lo tanto, estas bacterias acidolácticas tienen también propiedades inmunomoduladoras en la medida en que estimulan la producción de anticuerpos y refuerzan el sistema inmune.

Se considera un alimento probiótico aquel que cumple una serie de requisitos muy específicos:

-Ha de ser inocuo y sus efectos beneficiosos se pueden medir.

-Los microorganismos activos que lo componen deben sobrevivir al ambiente ácido del estómago y al proceso digestivo.

-Sus componentes deben ser capaces de colonizar el intestino y formar una barrera protectora contra bacterias patógenas como la escherichia coli, la salmonella, la staphilococus, la cándida, etc.

-Ha de ayudar a metabolizar los carbohidratos y a absorber las vitaminas en el tracto intestinal. Debe alterar, equilibrar y fortalecer la flora intestinal al mismo tiempo que estimula las defensas naturales del cuerpo.

-Ha de inducir efectos locales o sistémicos beneficiosos para la salud del huésped, más allá de los meramente nutritivos.

-Debe disminuir y prevenir el riesgo de contraer enfermedades además de mejorar el estado de salud. Estos criterios los cumplen básicamente los alimentos que contienen lactobacilos y bifidobacterias, microorganismos procedentes de la fermentación de la leche que se conocen genéricamente como bacterias acidolácticas.

En lo que se refiere a los lactobacilos existen diversas especies que varían enormemente en sus propiedades de adherencia al epitelio intestinal y en sus patrones de colonización, es decir, difieren ampliamente en sus propiedades probióticas o efectos beneficiosos. Entre los más utilizados en la industria alimentaria destacan los lactobacilos bulgaricus, acidophilus, casei, fermentum y plantarum. Pero además del lactobacilo, otros gérmenes han demostrado potencial terapéutico incluyendo unas pocas especies de Saccharomyces boulardii -una levadura-, la Bifidobacterium y el Streptococcus thermophilus. La clave está en que logren o no sobrevivir a los efectos de los jugos gástricos. Y es precisamente en este punto donde los científicos no se ponen de acuerdo sobre cuáles son probióticos y cuáles no.

En cuanto a la importancia de la actividad de los probióticos cabe decir que los científicos han demostrado su efecto beneficioso en estados patológicos como diarreas, síndrome de colon irritable, vaginitis, infecciones del tracto urinario, desórdenes inmunológicos, estreñimiento, gripe, intolerancia a la lactosa, hipercolesterolemia y alergia alimentaria, entre otras dolencias. Se les atribuye incluso propiedades para frenar tumores malignos en el colon siempre que el nivel de población de microorganismos sea lo suficientemente alto, igual o superior a los 10 millones de células por gramo de contenido, para que ejerza adecuadamente su función. Por tanto, es imprescindible que la ingesta de probióticos sea diaria a fin de mantener niveles elevados en el ecosistema digestivo.

lunes, 14 de septiembre de 2009

¿Porqué tomar probióticos?


El tracto gastrointestinal humano alberga un complejo ecosistema macrobiótico que contiene un gran número y variedad de bacterias. El conjunto de bacterias residentes en el tracto gastrointestinal humano tiene un gran impacto en la función gastrointestinal, y por lo tanto en la salud y bienestar humanos. Algunas de estas bacterias son oportunistas o consideradas perjudiciales y pueden causar condiciones adversas, tales como diarrea, problemas, gastroenteritis, y otros por el estilo, y otras bacterias son consideradas “probióticas” porque ayudan a realizar funciones beneficiales en el cuerpo humano. Se cree que las bacterias probióticas ejercen sus efectos para ayudar a reducir y retardar el crecimiento de bacterias patogénicas y perjudiciales en los intestinos. Pueden ayudar a estimular el sistema inmunológico y mantener niveles bajos de bacterias patogénicas y putrefactoras, reducir la cantidad de amoníaco y colesterol en la sangre y ayudar a mejorar la absorción de minerales.

Hay suplementos alimenticios comerciales en forma de tabletas, capsulas o liquidos que se mercadean como probióticos. Ellos contienen bacterias beneficiosas que pueden ser más eficaces que otras para tratar condiciones gastrointestinales y actuar como remedios naturales para una diversa gama de condiciones de salud.

¿Porqué necesitamos recuperar las bacterias con suplementos probióticos ?

La razón principal se debe a la erosión de nuestras bacterias naturales. ¿Pero cómo sucede eso? La mayoría de nosotros dependemos de un estilo de vida demasiado agitado – esto puede causar estragos en nuestro sistema nervioso y afectar el delicado balance en nuestro estómago e intestinos.

¿Los suplementos probióticos me causarán estreñimiento?

Para que puedas tomar una decisión informada, necesitas comprender el funcionamiento del colon. Nuestros órganos internos, incluidos el estómago y los intestinos grueso y delgado operan en una condición húmeda. La comida ingresa al estómago y los ácidos comienzan a trabajar descomponiéndola y procesándola. Luego comienza su largo viaje a través de los intestinos. Parte del proceso incluye una gran acción de apretar, para extraer los nutrientes y descartar el residuo. Un movimiento del vientre es generalmente húmedo y fácil de pasar. Nos enseñan que el estreñimiento se debe a la falta de fibra. Esto es verdad. El estreñimiento también puede ocurrir cuando hay líquidos insuficientes en forma de agua limpia para ayudar a pasar la materia de desecho.

Cuando tomes suplementos probióticos debes mantener tu ingesta de agua a nivel razonable.

¿Cómo sé si un suplemento probiótico es indicado para mí?

No hay producto en este mundo que sirva igual para todas las personas. Sin embargo, los suplementos probióticos se venden en millones de cajas cada año, y hay buenas razones por las que tantas personas repiten la compra. Consulta con un medico naturista, hay multiples lugares en el Internet donde te puedes orientar y educarte.

¿Es seguro usar suplementos probióticos durante el embarazo?

Cuando las personas se interesan en suplementos probióticos generalmente tienen algunos trastornos de salud. Pueden haber estado en un carrusel por mucho tiempo tratando de averiguar qué les pasaba y les hayan recomendado este remedio natural. Consulta con tu obstetra primero y habla del tema. Lleva la lista de ingredientes contigo.

¿Deberé cambiar mi dieta?

Soy un hombre que típicamente como carne y verduras. Si no como carne no me siento satisfecho y estoy muy irritable. ¿Necesito cambiar mi dieta mientras tomo suplementos probióticos?

No hay restricciones nutricionales. Sin embargo, el sentido común le dira que evite las comidas procesadas y los dulces. Haga buenas elecciones de alimentos pero no se culpe por un desliz. El cuerpo perdona bastante cuando se le vuelve a tratar bien.

¿A qué saben los suplementos probióticos?

Muchos suplementos probióticos vienen en forma de tabletas o capsulas, que al tragar no dejan sabor. Tambien vienen en tabletas masticables o en forma liquida con sabores agradables como guineo, vainilla, y otros.

¿Una persona debe tomar suplementos probióticos por un período determinado?

Cuando estás satisfecho con él, puedes detener el uso o continuar con una dosis de mantenimiento. Muchas personas informan que toman una dosis diaria de mantenimiento una vez por día.

¿Son los suplementos probióticos aptos para niños?

Deben buscar el consejo de un pediatra antes de dar a niños menores de 2 años. Tambien existen suplementos probióticos formulados especificamente para niños. Siga las instrucciones del producto.

jueves, 10 de septiembre de 2009

¿Es el yogur un alimento probiótico?

La característica que define a un microorganismo como probiótico es que pueda sobrevivir a los efectos de los jugos gástricos y biliares llegando activo al intestino grueso para llevar a cabo sus funciones beneficiosas.

Pero la verdad es que los científicos no se ponen de acuerdo a la hora de concretar qué microorganismos son probióticos y cuáles no.

Un grupo de investigadores aseguraba recientemente que el yogur no puede considerarse un alimento probiótico porque carece de efectos positivos ya que las bacterias lácticas que contiene -el Lactobacillus bulgaricus y el Streptococus thermóphilus- mueren a su paso por el tracto gastrointestinal.

Una afirmación que se contradice con las efectuadas por otro grupo de investigadores italianos quienes aseguran que las bacterias del yogur sí logran llegar al intestino grueso cuando se toman en cantidades elevadas. Así lo prueba el hecho de que se hayan encontrado esas bacterias intactas en las heces de sujetos sanos a los que se suministró diariamente durante diez días una dieta de 250 gramos de leche fermentada con las bacterias del yogur.

Hay que añadir que la mayoría de los estudios sobre probióticos se efectúan usando gérmenes vivos, completos. Sin embargo, gérmenes muertos y hasta componentes de gérmenes son suficientes para estimular reacciones inmunitarias en nuestro cuerpo.

Para solucionar esta polémica se han puesto en marcha varios trabajos a fin de determinar qué bacterias pueden considerarse probióticas y cuáles tienen solo propiedades nutricionales.

martes, 8 de septiembre de 2009

¿Que es un PREBIÓTICO?


El término prebiótico fue introducido por Gibson y Roberfroid definiéndolos como "ingredientes alimentarios no digeribles de los alimentos, que afectan beneficiosamente al huésped estimulando de forma selectiva el crecimiento y/o la actividad de un limitado grupo de bacterias en el colon y, de este modo, mejora la salud del organismo hospedador". Es decir, se trata de sustancias, mayormente de origen vegetal, que estimulan el crecimiento y la actividad de las especies bacterianas beneficiosas para el organismo.

Por el hecho de que no sean digeribles por los jugos gástricos llegan intactas al intestino grueso donde potencian la absorción de los alimentos probióticos, mejoran las funciones de la flora intestinal, regulan sus funciones y hacen aumentar el número de bifidobacterias útiles. Los prebióticos controlan además durante el tránsito intestinal y la absorción de grasas por parte del organismo actuando como antimicrobianos y anticancerígenos. También facilita la absorción del calcio y otros minerales además de colaborar activamente en la síntesis de vitaminas del complejo B y de la vitamina K.

Entre los prebióticos destacan sustancias como los oligosacáridos y la inulina, hidratos de carbono de estructura compleja y cadena corta que pasan sin digerir del intestino al colon y son consumidos por las bacterias en el colon. Estas sustancias se encuentran en alimentos como el trigo, ajo, cebolla, espárragos, puerro, remolacha, alcachofa y la raíz de achicoria. Cuando los ingerimos, los oligosacáridos y la inulina son transformados por las bacterias de la flora intestinal en el colon, produciendo ácidos grasos de cadena corta. Este proceso ayuda a aliviar las diarreas producidas por infecciones intestinales y nutre las células del intestino grueso. Además esos ácidos grasos son importantes para mantener la función de las células intestinales, disminuyen el pH en el colon y previenen así la posibilidad de desarrollar cáncer de colon. Estimulan la inmunidad para prevenir infecciones intestinales y eliminan las bacterias patógenas y sus toxinas. Asimismo, al modular positivamente la fisiología del tracto gastrointestinal, aumentan el peso de las heces y la frecuencia de evacuación intestinal.

Los prebióticos también encajan en la consideración de alimentos funcionales ya que, además de nutrir, proporcionan a quien los ingiere otras ventajas para su salud. Los expertos recomiendan ingerir cada día al menos un alimento o suplementos que contengan sustancias prebióticas o probióticas.

jueves, 3 de septiembre de 2009

PREBIÓTICOS Y PROBIÓTICOS: BACTERIAS SALUDABLES


El estrés, los malos hábitos alimentarios y el abuso de antibióticos son sólo algunos de los factores que pueden afectar negativamente el equilibrio de nuestra flora intestinal. Y en tales casos la ingesta de los llamados productos probióticos, que contienen microorganismos vivos y activos una vez que colonizan el intestino, y los prebióticos, que estimulan la acción bacteriana, es una buena alternativa, un remedio natural y sin efectos secundarios para mejorar el funcionamiento intestinal y optimizar nuestra salud.

De un tiempo a esta parte se están poniendo de moda los llamados "alimentos funcionales". Son alimentos enriquecidos que no sólo aportan a quien los ingiere beneficios meramente nutricionales sino también otros que le permiten mejorar su salud. Tal es el caso de los probióticos y prebióticos que además de nutrir a quien los consume, colonizan el intestino modificando positivamente la flora intestinal y mejorando el funcionamiento del sistema inmune y por tanto, la salud global del organismo.

lunes, 31 de agosto de 2009

Microorganismos saludables

Estos son los microorganismos beneficiosos (conocidos como probioticos) para nuestra salud que más frecuentemente se utilizan en la industria alimentaria:

-Streptococus thermóphilus y Lactobacillus Bulgáricus: son las dos cepas típicas del yogur tradicional. Se asegura que favorecen la absorción de la lactosa y estimulan la actividad biológica de péptidos, aminoácidos libres, minerales, vitaminas y enzimas.

-Lactobacillus acidophilus: es uno de los probióticos más populares. Se emplea para tratar diarreas porque reequilibra la flora intestinal eliminando la flora bacteriana nociva que provoca la descomposición.

-Lactobacillus casei: es uno de los probióticos más activos. Decenas de estudios demuestran sus efectos beneficiosos sobre las defensas del organismo y sobre los niveles de triglicéridos y colesterol sanguíneos.

-Bifidobacterium: son bacterias probióticas que realzan la acción de los microorganismos intestinales beneficiosos. También aumentan las defensas.

viernes, 28 de agosto de 2009

FLORA INTESTINAL, CLAVE DE LA SALUD

Para algunos expertos la clave de nuestra salud reside en nuestros intestinos. Y es que el intestino no es un simple órgano de absorción. Es el elemento más relevante para la actividad del sistema inmune y los mecanismos de protección. Sus células inmunocompetentes reconocen los agentes patógenos y activan la producción de linfocitos que, a su vez, segregan anticuerpos específicos.

Cuando nacemos el tracto gastrointestinal es estéril pero poco después se instala de forma permanente un complejo conjunto de aproximadamente 400 tipos diferentes de microorganismos que trabajan en armonía para el mantenimiento de la salud. Esa microflora, la flora intestinal, pesa más de un kilo, puede estar compuesta por hasta 100 billones de microorganismos diferentes y tiene una actividad metabólica global similar a la de un hígado.

Una vez que esa microflora se ha instalado puede verse afectada negativamente por factores como el consumo de alimentos refinados pobres en fibra, los tratamientos con antibióticos y el estrés, entre otros. Pero también se le puede ayudar mediante la introducción en nuestra dieta de alimentos prebióticos y suplementos probióticos, alimentos considerados funcionales porque son capaces de modificar la flora intestinal, entre otros efectos saludables. De esta forma, a la vez, se produce un efecto beneficioso sobre el sistema inmune que nos permite prevenir distintas enfermedades, incluido el cáncer.

miércoles, 26 de agosto de 2009

Efectos saludables de los probióticos

El Instituto Internacional de Ciencias de la Vida define el probiótico como un ingrediente alimenticio vivo que implica un beneficio para la salud.

Entre los efectos saludables como remedio natural, que se le atribuyen a estos suplementos probióticos se destacan:

-Estimulan el sistema inmune, participan en la erradicación de microorganismos patógenos y estabilizan el ambiente microbiano en la flora intestinal. Se ha comprobado que algunas de estas bacterias acidolácticas son capaces de prevenir infecciones intestinales así como ejercer una acción antitumoral al inhibir agentes químicos carcinogénicos. En esta labor defensiva resulta especialmente efectivo el lactobacilo Casei.

-Elimina la mayoría de los metabolitos desfavorables y las enzimas pro-cancerogénicas en el colon. Por tanto, ayudan a prevenir el cáncer de colon. Además, estudios epidemiológicos han establecido una correlación entre el consumo prolongado de alimentos ricos en probióticos (especialmente, lactobacilo acidophilus y bifidobacteria infantis) y un riesgo menor de desarrollar cáncer de mama.

-Refuerzan la capacidad del organismo para absorber minerales, en especial, calcio, hierro, zinc y magnesio.

-Reducen el colesterol en la sangre pues debilitan su proceso de síntesis.

-Reducen la antigenicidad de los alimentos ingeridos, por lo que pueden ser útiles en casos de alergia u/o intolerancia alimentarias.

-Mejoran la nutrición del huésped. Y lo hacen produciendo y facilitando la disponibilidad de vitaminas del grupo B y rompiendo los compuestos como proteínas y grasas que, posteriormente, pueden ser mejor asimilados por el individuo.

-Favorecen la digestión de la lactosa en casos de mala absorción de la misma. Este efecto se debe a la enzima B-galactosidasa que segregan estos microbios y que es similar a la lactasa de la que carecen las personas intolerantes a este azúcar.

-Producen ácidos que estimulan el peristaltismo intestinal y reducen el tiempo de tránsito de las heces. Así se consigue el alivio del estreñimiento, del síndrome de colon irritable y de las diarreas (incluso las producidas por antibióticos), entre otras dolencias gastrointestinales.

lunes, 24 de agosto de 2009

Que son los probioticos


* Los probióticos son bacterias benéficas (algunas veces descritas como "gérmenes amistosos") que ayudan al mantenimiento de la salud del tracto intestinal y a la digestión. También ayudan a mantener bajo control a organismos potencialmente dañinos en los intestinos (bacterias dañinas y levaduras). La mayoría de los probióticos provienen de fuentes alimenticias, especialmente los productos lácteos cultivados, pero tambien se consiguen suplementos probióticos en cápsulas, tabletas, bebidas y polvos.

* Los probióticos no deben confundirse con los prebióticos. Los prebióticos son azúcares complejos (tales como la lactulosa, lactitol, una variedad de fructo-oligosacáridos y la inulina) los cuales son utilizados como combustible por las bacterias saludables para estimular su crecimiento y actividad, a la vez que frenan el crecimiento y actividad de organismos dañinos. Otros alimentos que pueden ayudan a la actividad probiótica son el miso japonés, tempeh, kéfir, leche cruda, kombucha, bananos, ajo y cebolla. Cuando en un producto se combinan los prebióticos y los probióticos, se le denomina un producto simbiótico.

* Se cree que los probióticos actúan colonizando el intestino delgado y desplazando los organismos causantes de enfermedades, por lo cual restauran el equilibro adecuado de la flora intestinal. Los probióticos compiten con los organismos dañinos por los nutrientes y también pueden producir sustancias que inhiben el crecimiento de organismos dañinos en el intestino.

* Se ha encontrado que las bacterias probióticas estimulan el sistema inmunológico del cuerpo. También pueden ayudar a combatir varias enfermedades gastrointestinales tales como la enfermedad inflamatoria del intestino, diarreas relacionadas con antibióticos, Clostridium difficile colitis inducida por toxina, diarrea infecciosa, encefalopatía hepática, síndrome de colon irritable y alergias.

* Se ha encontrado que los probióticos fortalecen la digestión y absorción de proteínas, grasas, calcio y fósforo. También pueden ayudar a superar la intolerancia a la lactosa. Por último, pueden ayudar a restaurar las bacterias saludables después de que una terapia con antibióticos haya alterado la normalidad de la flora gastrointestinal.

jueves, 20 de agosto de 2009

Probióticos para prevenir los catarros

¿Podrían las bacterias, a veces agregadas a los alimentos o como suplementos probioticos, protegernos de los resfriados?

En un estudio en China, niños que tomaron suplementos probióticos con leche dos veces al día durante el invierno y la primavera padecieron menos catarros, necesitaron menos antibióticos y perdieron menos días de clase que otros niños que bebieron solo leche.

Investigaciones previas han demostrado que los probióticos pueden ayudar a la salud, ya que esas bacterias refuerzan la respuesta inmunológica a los invasores. Pero se desconoce si son tan efectivas para prevenir dolencias.

El estudio efectuado en China incluyó a 326 niños, de entre 3 y 5 años, que al azar integraron tres grupos: uno tomó leche con la bacteria Lactobacillus acidophilus, otro recibió el mismo organismo pero con una cepa de otra bacteria, Bifidobacterium animalis y el último sólo bebió leche con un placebo (controles).

Los niños tomaron las fórmulas de prueba dos veces por día, entre noviembre del 2005 y mayo del 2006; la supervisión estuvo a cargo de personal de la escuela durante la semana y de los padres/tutores durante los fines de semana.

A diferencia del grupo tratado con placebo, los niños que ingirieron el Lactobacillus tuvieron un 53 por ciento menos catarros, un 41 por ciento menos tos y un 28 por ciento menos mucosidad.

En cambio, el grupo tratado con suplementos de Lactobacillus/Bifidobacterium tuvo muchos menos síntomas: un 72 por ciento menos fiebres, un 62 por ciento menos de tos y un 59 por ciento menos mucosidad.

Asimismo, cuando los niños tratados con suplementos probióticos tuvieron fiebre, tos o mucosidad, se recuperaron significativamente más rápido que el grupo de control.

Además, la duración de la enfermedad se redujo un 32 por ciento con suplementos de Lactobacillus y un 48 por ciento con la combinación Lactobacillus/Bifidobacterium.

Comparado con el grupo de control, el uso de antibióticos fue un 68 por ciento menor en los participantes tratados con suplementos de Lactobacillus y un 84 por ciento menor en los que tomaron Lactobacillus/Bifidobacterium.

Por último,los niños tratados con suplementos probióticos faltaron a la escuela entre un 28 y un 32 por ciento menos que los controles.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Probioticos y bacterias

El término 'probiotico' se deriva del Griego, significa `para la vida'. Probioticos están definidos actualmente como los microorganismos vivos `que, cuando son consumidos en cantidades adecuadas, confieren una ventaja contra las enfermedades al anfitrion'. Las descripciones comunes para los probioticos incluyen bacterias beneficiosas, o bacterias saludables.

Las bacterias probióticas son generalmente, aunque no exclusivamente, bacterias del ácido láctico e incluyen Lactobacillus acidophilus, L. casei, L. bulgaricus, L. plantarum, L. salivarius, L. rhamnosus, L. reuteri, Bifidobacterium bifidum, B. longum, B. infantis y S. thermophilus. Las bacterias probióticas se utilizan en la producción de yogur, varios productos lácteos fermentados y de suplementos dietéticos.

LACTOBACILOS Y BIFIDOBACTERIA

Los lactobacilos y Bifidobacteria son las bacterias generadores de ácido láctico grampositivas que constituyen la mayor parte de la microflora intestinal normal en animales y seres humanos. Estas bacterias amistosas desempeñan un papel dominante en el aumento de resistencia a la colonización por los organismos exógenos, potencialmente patógenos.

Lactobacilos: Los lactobacilos son bacterias grampositivos, no-espora, formando barras o cocobacilos. Tienen requisitos alimenticios complejos y son estrictamente fermentantes, aerotolerante o anaerobicos, acidúricos o acidófilos. Los lactobacilos se encuentran en una variedad de habitats en donde los substratos con carbohidrato están disponibles, por ejemplo, las membranas de la mucosa humanas y animales, en las plantas o el material de origen de plantas, aguas residuales y de la fermentación o de estropear el alimento.

Bifidobacteria: Los Bifidobacterias constituye la mayor parte de la microflora intestinal normal en seres humanos a través de la vida. Aparecen en la excreta algunos días después del nacimiento y aumentan en gran número después de eso. El número de bifidobacteria en el colon de adultos es 1010 - 1011 CFU/gramo, pero este número disminuye con la edad. Diferencias demográficas tambien afectan el número y la especie de bifidobacteria. Bifidobacteria es barras grampositivas, con aspecto diverso. La mayoría de las cepas son exclusivamente anaerobicas. B. longum se puede considerar como la especie más común de bifidobacteria, siendo encontrado ambos en heces infantiles y adultas. Esta especie esta estrechamente vinculada a B. infantis, que lleva a menudo a problemas de identificación.

lunes, 17 de agosto de 2009

Alimentos y suplementos probióticos



Su tracto digestivo hospeda a unos 400 tipos diferentes de microorganismos. Algunos de ellos, como la bacteria Lactobacillus acidophillus, por ejemplo, son buenos para usted pues le ayudan a digerir los alimentos y así beneficiarse de sus nutrientes. Otros, como la Escherichia coli y Salmonella son patógenos porque causan toxicidad y diarrea.

En una persona sana, las bacterias benignas (probióticos) actúan como una escuadrilla de policía --- evitan que las colonias de bacterias patógenas prosperen e invadan la zona. Ingerir alimentos y suplementos probióticos es una manera segura y simple de introducir bacterias benignas en su sistema digestivo.

Estas bacterias se multiplican en el tracto gastrointestinal y compiten con los gérmenes patógenos forzándolos fuera de su sistema. El yogurt con cultivos activos (vivos) y alimentos fermentados como el sauerkraut son probióticos. Éstos también se encuentran en forma de suplementos probioticos en cápsulas, píldoras o polvos.

Mire lo que pueden hacer por usted:

Aliviar la diarrea asociada a antibióticos o infecciones por levaduras. Los antibióticos destruyen bacterias benéficas junto con las que causan enfermedades, lo cual permite a los patógenos prosperar. Algunas de estas bacterias producen una toxina que causa diarrea. Consumir suplementos probióticos mientras está bajo terapia con antibióticos puede mantener su sistema balanceado. También normaliza la función intestinal en mujeres con síndrome de colon irritable.

Estimular la inmunidad. Cuando una persona toma un suplemento que contiene una cepa de Lactobacillus rhamnosus dos veces al día por seis semanas, su función inmunológica casi se duplica, de acuerdo aun estudio conducido por investigadores de las universidades de Taiwán y Nueva Zelanda.

Prevenir la caries. Bacterias que moran en la cavidad oral llamadas Streptococcus mutants se adhieren a la placa y producen ácido láctico, causante de caries. Las especie Lactobacillus y Bifidobacterium presentes en suplementos probióticos pueden contrarrestar a S. mutants y ayudar a prevenir las caries.

Reducir los días de enfermedad. En un estudio sueco, se dividieron 262 empleados sanos en dos grupos, uno bebió una dosis diaria de Lactobacillus reuteri por 80 días y el otro recibió placebo. Quienes bebieron el probiótico tomaron la mitad del número de días de enfermedad que aquellos en el grupo placebo.

¿Otro beneficio de los probióticos? No hay efectos adversos directamente asociados a ellos. Ingiera una porción diaria de yogurt con cultivos activos o beba una botella que contenga especies de Lactobacillus a niveles diez veces más altos que el yogurt regular. Si no le gustan los lácteos pruebe las cápsulas probióticas.

viernes, 14 de agosto de 2009

Usos y beneficios de los probióticos

Se han sometido a prueba los siguientes usos en humanos o animales. La seguridad y eficacia de los mismos no siempre se han demostrado. Algunas de estas afecciones son potencialmente serias y las debe evaluar un proveedor médico calificado.

Antibióticos (los probióticos reducen efectos adversos relacionados con uso de antibióticos)

Un creciente número de estudios apoya el uso de probióticos como suplemento para la terapia con antibióticos. La suplementación con probióticos durante un tratamiento de antibióticos puede reducir los efectos adversos de los antibióticos sobre el medio intestinal. Esto incluye la reducción del crecimiento de la bacteria Clostridium difficile, la cual puede conllevar a la colitis, una complicación común relacionada con los antibióticos, especialmente en las personas mayores. Algunos probióticos también ayudan a prevenir que se desarrolle resistencia a los antibióticos. Se ha establecido que en niños con enfermedades agudas los simbióticos conllevan a una mayor ganancia de peso y a menos enfermedades bacteriales después de terminar el tratamiento con antibióticos. La evidencia es consistente en apoyar la suplementación con probióticos.

Infección por Helicobacter pylori

Los antibióticos son el tratamiento más utilizado para erradicar la Helicobacter pylori, que es la causa de la mayoría de las úlceras estomacales. Los efectos secundarios más comunes son inflamación del abdomen, diarrea y trastornos del gusto. Los probióticos reducen estos efectos secundarios y generalmente ayudan a que las personas toleren el tratamiento. También pueden reducir los niveles de H. pylori tanto en niños como en adultos. El yogurt con probióticos suprime la infección por H. pylori y puede llevar a una erradicación más completa de ésta durante el tratamiento con antibióticos.

Dermatitis atópica (eczema)

Los probióticos parecen ser promisorios en la reducción o prevención del síndrome de eczema atópico/dermatitis en niños. Los bebés se benefician cuando sus madres ingieren probióticos durante el embarazo y la lactancia. La suplementación directa en niños puede reducir la incidencia del eczema atópico hasta en la mitad. También puede reducir las alergias a la leche de vaca y otras reacciones alérgicas que aparecen cuando se suspende el amamantamiento. Los probióticos pueden estabilizar la función de barrera intestinal y disminuir los síntomas gastrointestinales en niños con dermatitis atópica. No obstante, la respuesta de los niños ante probióticos específicos difiere. La efectividad de los probióticos en el tratamiento de eczemas aún está bajo investigación.

Cirrosis

La cirrosis del hígado puede estar acompañada de un desbalance de la flora bacterial intestinal. La suplementación probiótica en pacientes con cirrosis ha demostrado reducir el nivel de acidez fecal (pH) y el de amoníaco fecal y sanguíneo, los cuales son cambios benéficos.

Cáncer de colon

Existe evidencia reciente de que la suplementación con Lactobacillus casei puede ayudar en la reducción de la recurrencia de tumores colorrectales en pacientes que han sido sometidos previamente a cirugía para el cáncer de colon.

Caries dentales

El consumo de queso que contiene probióticos puede ser benéfico para las caries dentales, en el corto plazo. También existe evidencia de que cuando se añaden probióticos Lactobacillus rhamnosus GG a la leche, pueden ayudar a reducir las caries dentales en niños pequeños.

Diarrea en niños (nosocomial)

El Lactobacillus GG puede reducir el riesgo de diarrea nosocomial (originada en ambientes hospitalarios) en niños, particularmente en los casos de gastroenteritis por rotavirus.

Prevención de la diarrea

Existe un apoyo tentativo al uso de probióticos en la prevención de la diarrea en adultos y niños. La suplementación puede beneficiar a hombres que sean VIH positivo; la suplementación con yogurt que contenga el Lactobacillus casei puede ayudar a reducir la incidencia en adultos jóvenes y saludables. Los niños se pueden beneficiar del Bifidobacterium lactis (cepa Bb 12) añadido a su leche de fórmula.

Crecimiento

Existe evidencia de que los niños jóvenes (edades de 6-36 meses) que reciben leche de fórmula suplementada con bifidobacterias Bb12 pueden lograr un crecimiento más rápido que cuando no tienen suplementación.

Fortalecimiento de la inmunidad

Las investigaciones indican que los probióticos, especialmente aquellos en la leche y los alimentos pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunológico. No obstante, el yogurt de fabricación comercial puede no ser tan efectivo. Se requieren estudios adicionales para ofrecer recomendaciones, especialmente en relación al yogurt.

Infecciones (gastrointestinales/respiratorias)

Existe evidencia limitada que indica que la suplementación con Lactobacillus GG a niños que asisten a guarderías puede ayudar a disminuir el número de días que pasan enfermos, así como la frecuencia de infecciones del tracto respiratorio y de los tratamientos con antibióticos para los mismos.La leche fermentada (con cultivos de yogurt y L. casei DN-114001) puede reducir la duración de las infecciones durante el invierno (gastrointestinales y respiratorias), así como la temperatura corporal promedio en personas mayores.

Diarrea infecciosa

Los probióticos pueden reducir la duración de los síntomas de diarrea infecciosa en adultos y niños, de 17 a 30 horas. Las formas efectivas son la cepa Lactobacillus GG, Lactobacillus reuteri, combinación de Lactobacillus rhamnosus y Lactobacillus reuteri, la combinación de Lactobacillus acidophilus y Lactobacillus bifidus. Se necesitan estudios adicionales para evaluar los tipos, dosis, duración del tratamiento y la relación que tienen con patógenos específicos.

Síndrome de colon irritable

Muchas clases de probióticos han demostrado una reducción moderada de los síntomas del síndrome de colon irritable, tales como dolor, flatulencias, inflamación abdominal y frecuencia de deposición. Existe alguna evidencia de que los probióticos pueden reducir las inflamaciones y mejorar la calidad de vida. No obstante, no todos los estudios demuestran efectos benéficos.

Pancreatitis (aguda)

La suplementación con Lactobacillus plantarum 299 puede ayudar en la prevención de la infección pancreática (sepsis), reducir el número de operaciones que se necesitan, así como la duración de la estadía en el hospital para tratamiento de la pancreatitis aguda.

Colitis/diarrea inducida por radiación

Los probióticos pueden ayudar al tratamiento o la prevención de la diarrea inducida por radiación en pacientes con cáncer.

Sinusitis (hipertrófica)

El uso de la bacteria probiótica Enterococcus faecalis en la sinusitis hipertrófica (inflamación de los senos nasales) puede reducir la frecuencia de reincidencias y la necesidad de terapia con antibióticos.

Colitis ulcerosa

Aparentemente el E. coli Nissle 1917 es tan efectivo como la droga mesalazina, aunque no está disponible actualmente en los Estados Unidos. Se ha demostrado que una variedad de preparados con Bifidophilus han sido efectivos en la prevención de la reincidencia o en el mantenimiento de la enfermedad en remisión. Dentro de estos se incluyen los Bifidophilus solos, los bifidophilus en productos con leche fermentada y una preparación simbiótica. Una combinación de probióticos que consiste en VSL#3 y balsalazida puede ser más efectiva que la balsalazida o la mesalazina solas. Se necesitan estudios adicionales para determinar de manera clara los resultados que pueden esperarse.

Alergias

La evidencia preliminar es promisoria en indicar que los probióticos pueden ayudar al tratamiento de afecciones alérgicas, especialmente las relacionadas con la piel de los infantes. Muchos estudios han probado los probióticos en niños, adolescentes y jóvenes adultos. Alguna evidencia indica que los probióticos pueden ayudar a disminuir la inflamación causada por alergias. No obstante, los resultados de los estudios son mixtos en relación a las alergias por inhalación, tales como la rinitis alérgica (inflamación y descarga nasal).

Estreñimiento

El uso de probióticos para el estreñimiento arroja resultados mixtos. Algunos estudios indican que pueden ayudar a reducir los síntomas en pacientes que padecen de estreñimiento de largo plazo. No obstante, otro estudio no demostró su efectividad en niños jóvenes. Se requieren más estudios para determinar qué formas de probióticos y vías de administración podrían ser efectivas contra el estreñimiento.

Intolerancia a la lactosa

La suplementación de las leches de fórmula para niños con probióticos es una propuesta potencial para el manejo de las alergias a la leche de vaca, aunque la evidencia es conflictiva en determinar si mejora la digestión de la lactosa. Se requiere investigación adicional en esta área antes de que se pueda llegar a una conclusión.

Candidiasis bucal

Evidencia preliminar indica que los quesos que contienen probióticos pueden ayudar a reducir el riesgo de infecciones bucales fúngicas (conocidas como candidiasis bucal) en personas ancianas. Se requiere investigación adicional en esta área.

Infección del tracto urinario

Estudios de preparados de Lactobacillus han arrojado resultados mixtos. La evidencia indica que una combinación de Lactobacillus rhamnosus GR-1 y L. fermentum RC-14 puede reducir las bacterias vaginales y la levadura potencialmente dañinas en mujeres saludables. Otros estudios no han encontrado beneficios en mujeres o infantes pretérmino. Se requieren estudios adicionales para determinar la efectividad de los probióticos contra las infecciones urinarias y del tracto urogenital.

miércoles, 12 de agosto de 2009

El rol de Probioticos en la salud

Por siglos, el folklore sugirió que los productos lácteos fermentados que contienen culturas activas vivas son saludables. La investigación científica controlada reciente apoya estas opiniónes tradicionales, sugiriendo que los probioticos son una parte valiosa de una dieta sana. Además, la aparición de algunos nuevos riesgos para la salud sugiere un papel importante de los probioticos en la mitigación de la enfermedad. Por ejemplo, la capacidad de bacterias probióticas de apoyar el sistema inmune podía ser importante para los ancianos u otra gente con la función inmune comprometida. Es importante que los individuos comprometidos inmunes preguntan a su doctor antes de tomar cualquier suplemento dietético, incluyendo probioticos.

Las infecciones son otra área con el potencial para los probioticos. Algunas infecciones, una vez fácilmente tratables con antibióticos, ahora se reconocen como amenazas más serias de la salud. La vaginosis bacteriana era considerado apenas una molestia. Ahora sabemos que está asociado a niños bajos de peso en el nacimiento y a riesgo creciente de enfermedades. Los nuevos patógenos producidos por los alimentos han emergido como frecuentes y peligroso para la vida, incluyendo Escherichia Coli. Las resistencias a antibióticos múltiples son una amenaza continua en la batalla contra infecciones que una vez fueron tratables. Y en naciones no-industrializadas, las infecciones tales como rotavirus demandan las vidas de centenares de millares de niños anualmente. La prevención de infecciones antes de que ocurran es claramente la mejor alternativa. Ciertos probioticos pueden ser un acercamiento seguro, que agrega una barrera adicional contra la infección microbiana.